El ministro de Salud porteño aseguró que las camas ocupadas con pacientes graves bajaron al 50 por ciento y con leves descendieron a los niveles de mayo o junio.
El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, aseguró este viernes que «van a seguir llegando casos» de coronavirus a la Ciudad de Buenos Aires, pero dijo que lo importante es «montar un sistema de identificación y testeos para evitar posibles rebrotes», al tiempo que aseguró se respetará el reclamo de los trabajadores de la sanidad.
«Hemos intensificado los testeos, por eso es probable ver como cambia la curva de cantidad de confirmados con más casos de asintomáticos y eso se constata con el descenso del uso de las camas de terapia del sistema público como las de los hoteles, que fue más intenso que el descenso de la propia curva de contagios», explicó el funcionario en una conferencia de prensa sobre la situación epidemiológica.
El ministro explicó que las camas ocupadas con pacientes graves «bajaron al 50 por ciento y con leves bajaron a niveles de mayo o junio, pero la curva de casos no ha bajado tanto y tiene que ver con la intensidad de los testeos».
«Me parece importante aclarar que esta enfermedad es muy contagiosa, por eso más que intentar bloquear ciudades o países, hay que montar un sistema de identificación de detección precoz, con rastreo, testeo y aislamiento», aseveró.
En esa línea, dijo que el coronavirus circuló en todas las ciudades del mundo, por lo que «pensar que uno lo puede evitar es poco cumplible, van a seguir llegando casos a la Ciudad, la forma es montar un sistema de identificación; por eso ampliamos los testeos».
Sobre la posibilidad de habilitar el sector turístico, Quirós expresó que «siempre dijimos que tenemos un plan de reapertura de todas las áreas y estamos trabajando en la construcción de ciudadanía, en como nos tenemos que cuidar».
«Tenemos un puente de muchos meses, y durante ese tiempo debemos construir los protocolos; seguramente en noviembre tendremos una definición sobre las fechas», precisó.
Sobre el anuncio de una medida de fuerza de los trabajadores de la salud, en especial de enfermeros, tras la agresión que sufrieron frente a la Legislatura porteña, dijo que «nosotros no tenemos que opinar del paro que decidieron los trabajadores del sistema de salud, defendemos las expresiones populares y la libertad de expresión, así que vamos a respetar lo que decidan los trabajadores».
